Mi opinión es muy mía y la comparto porque me hace bien escribir, así que es una acción puramente egoísta. No escribo porque sea una conocedora de las leyes, tampoco de hechos históricos exactos, no soy abogada ni me dedico a la política. Tampoco estoy graduada en letras ni en psicología, o sea que en términos de jueces terrenales, no soy nadie. Yo soy una simple ciudadana, común y corriente, que ha vivido como muchos de ustedes los estragos de la guerra provocada por los grupos insurgentes del M-19 (en su momento), las FARC, el ELN y EPL, desconozco si hay más. Más allá de sentir pavor de viajar por carretera en el tiempo de las pescas milagrosas, ninguno de mis familiares ha sido secuestrado, tampoco nos han extorsionado. No nos han matado a nadie ni han reclutado a ninguno de nuestros niños, a Dios gracias, pero nos pudo haber pasado o nos puede pasar si las cosas siguen como van. Los problemas que he vivido se identifican con los de otros miles de colombianos, pobreza,...
Soy una mamá que también ha sido actriz, cantante, productora, compositora, esposa y sigo aprendiendo. Escribo porque siento que lo necesito. Espero que lo disfruten tanto como yo.