Quiero a mi país y quiero verlo descansar antes de morirme. Me parece que vivir en paz deber ser una constante en nuestras vidas. Vivir en paz, con nosotros mismos primero, y en paz con la mamá, el vecino, el jefe o el señor del supermercado. No hay que odiar a los más ricos, ni a los más exitosos, ni a los más bonitos, se sufre mucho así porque el mundo está lleno de gente más suertuda que uno. Tampoco a las minorías o a las diferentes razas. No se gana nada incentivando la envidia y el resentimiento, eso no es de corazones que están en paz. Creo que el perdón es el único camino liberador y sanador . Yo decido perdonar a la gente que me hace daño o le hace daño a los que quiero, principalmente para no hacerme daño yo misma con odios y resentimientos, y sin duda, eso rebotará en el universo, en mi salud y en mi condición como ser humano. Pero perdonar no es olvidar, perdonar es liberar al corazón del daño que le causa una persona o una situación y eso, por supuesto, genera
Soy una mamá que también ha sido actriz, cantante, productora, compositora, esposa y sigo aprendiendo. Escribo porque siento que lo necesito. Espero que lo disfruten tanto como yo.